A veces hay que pararse a descansar para sentirnos algo mejor, sobre todo para ir recuperando nuestro estado de forma.
-Nuestro estado original. -A nuestros niños…
Sé que lo vamos a lograr, que nos vamos a sentir orgullosos de nosotros, que nos vamos a mirar a nosotros mismos y sentir esa intensa sensación en el estómago, como de costumbre, cuando estamos intensos. Pero esta vez será por sentirnos UNO con nosotros, reafirmados, seguros con nuestras acciones, y lo mejor, con nuestra vida.
En ocasiones, es cierto que el proceso se pone cuesta arriba. Es una pendiente muy difícil de transitar, un chorro de estados emocionales que nos generan malestar y desespero; es tanto el dolor que el sufrimiento se dispara, acentuando en nuestro interior una desazón difícil de armonizar; pero estamos ahí, dispuestos para la confrontación, afrontando sin parangón, decididos a SER nosotros…
Tal y como somos, sin avergonzarnos.
Dejando la insuficiencia a un lado y la no validez.
Para «Transformar y trascender», …
Somos suficientes y válidos, y eso lo tenemos que ver nosotros mismos. No es una teoría, es la acción de SER.
Sin ese sentimiento de pérdida de dignidad causado por una falta cometida o de incomodidad producida por el temor de hacer el ridículo ante alguien o ante los demás o ante nosotros mismos.
Momentos de HONRA vivimos; de respeto y de aprobación. Que tenemos ante nuestras cualidades morales y de dignidad a nuestra persona y el proceso que lo permite para SER nosotros.
Tal y como es para poder elegir, siendo «consciente» de que vinimos a vivir nuestro destino, el propósito de nuestra vida, el que nos lleva a nosotros…
«A nuestro ENCUENTRO»
La integridad es la entereza moral de ser y saber que, tal y como somos, es como es.
Para elegir quién somos ante lo que tenemos que vivir…
La integridad es lo contrario a la negación de nosotros mismos.
Levantemos la mirada y miremos de frente a nuestros ojos. No la apartemos y reconozcámoslo ante nosotros, –porque solo nosotros– podemos amarnos y así sentir ese amor en los demás, hacia nosotros.
Lo estamos haciendo bien…
Por fin llegó el momento de que saquemos a nuestros niños a jugar sin el miedo de no ser aceptados por nosotros mismos.
Continuemos y sigamos, que la vida es un viaje maravilloso, lleno de color.
No permitamos que en esta ocasión nos engañe el sufrimiento y acapare el protagonismo, haciendo que distorsione los colores que la vida tiene.
No le dejemos que nos susurre al oído ese «estamos cansados de sufrir»… y creamos por ello que es la vida quien tiene la culpa y no lo es;
-es el sufrimiento el que hemos de transformar-.
«Porque la vida siempre tiene color»
La falta de arropo que a menudo nos acompaña, la tenemos que subsanar en nuestro interior…
«AMANDO nuestro proceso»
Que hoy tengan un precioso día…
De esos que sienten que merece la pena este viaje LLAMADO VIDA 💦
#Gotitasdeagua888
